Una hembra de ratonero «urbano» muere por ingestión de brodifacoum
by A.J. García Fernández
nebirdsplus, vía Flickr» alt=»Ruby llegando a su nido. Obtenida de nebirdsplus, vía Flickr» src=»https://s.yimg.com/os/publish-images/news/2014-06-26/ba2bee50-fd02-11e3-8c48-f500cde4dbd5_5819176575_62d2428bf1_b.jpg» width=»248″ height=»185″ align=»middle»>
Ruby y Buzz son los nombres de dos ratoneros de cola roja (Buteo jamaicensis) que tenían su nido en la ciudad de Cambridge, en el estado Massachusetts. Enlace a la noticia En abril Ruby, la hembra, apareció muerta debido a la ingestión de raticidas utilizados para el control de roedores en la ciudad. Hasta tres raticidas fueron detectados en el cadáver de Ruby; sin embargo, según la Universidad de Tufts, parece ser que el que causó la muerte de Ruby fue el brodifacoum, un rodenticida anticoagulantes de segunda generación derivado de la cumarina. Este compuesto inhibe la enzima que reactiva la vitamina K, una vez usada en el organismo provocando así un descenso de dicha vitamina, afectando así a la coagulación.
Además del efecto indeseado de la muerte de un animal, y más de esta especie, ha de tenerse en cuenta la información que como animales centinela nos aportan estas especies. En tal sentido debe tenerse en cuenta el alto riesgo de ingestión accidental que se da en los niños, donde los efectos son los mismos que se observan en estas aves y en el resto de especies de mamíferos.
En estos momentos está tomando cuerpo la necesidad de controlar aún más este tipo de sustancias de comercio y uso legal, con escasas restricciones. A raíz de este caso los ciudadanos han colaborado con la Universidad de Tufts – centro al que pertenecen los investigadores que han realizado los análisis forenses – creando un fondo para estudiar el impacto de estos venenos en poblaciones de aves rapaces.